03 julio 2010

MOB POWA Chronicles IV

La obsesión del sacerdote

Altas torres, gruesas columnatas, pesadas puertas, grandes paredes decoradas con murales, vitrales luminosos y un Emperium meramente ornamental, así era el castillo KriemHild asaltado y conquistado por el clan Mob Powa días atrás.

Explorando el castillo, revisando los tesoros que venían con los territorios, se encontraba un sacerdote, habiendo abierto cada cofre, baúl y arcón se sorprendía de las riquezas obtenidas y cuando se retiraba, seguro de haber contado todo su botín, Mob Escoop encontró una pequeña bolsa arrumbada en un rincón.

Los demás Mob disfrutaban de su nueva adquisición y los territorios adyacentes; Fureimes salía al bosque acompañado de Pumekeruz y su halcón en busca de blancos para sus flechas, Niko cabalgaba libre su peco dentro de KriemHild, Diego y Manu probaban nuevos conjuros uno sobre el otro, caían y se levantaban para contraatacar, Zopi a nadie más que a su guitarra podía escuchar, causando la rabia de Bvtro que necesitaba de Zopi para entrenar un poco, Setsuna no se encontraba, había salido a Prontera luego de la conquista y no había vuelto.

La aparente calma que reinaba se cortó a la voz de una carcajada que salía de la sala del Emperium, los Mob, intrigados, entraron uno a uno al gran salón, donde encontraron sentado en un rincón a un sacerdote sosteniendo una bolsa de tela poco más pequeña que su puño.
-Escoop... ¿estás bien? -pregunta Diego.
-¿Yo? Perfectamente, hermano... tan bien como para cantar... canta conmigo -responde Escoop.
-Qué humor tan... ¿eufórico? traes hoy... ¿a qué debemos el “honor”?-pregunta Manu.
-Ya se deschavetó este cuate -asegura Zopi y, supliendo el puño de Niko, el puño de Fureimes lo acalla.
-¿Qué traes en la bolsa?- Diego se siente intrigado-
-¿Por qué? ¿La quieres?... ¡No! ¡Es mía, maldición! ¡Soy el líder del clan y proclamo la bolsa como mía y todo su contenido!... Tú no la tendrás... ¡Ninguno de ustedes!- tras estas palabras se levanta una nube verde a su alrededor, a la voz de Pneuma, estira sus brazos hacia el clan y arroja una rayo de luz que golpea con fuerza a Diego en el pecho y lo estrella contra una pared, pierde el conocimiento.
-¿Alguien más?
-Tranquilo, Escoop, somos amigos, a ver, dame esa bolsa, ya has tenido suficiente-intenta calmar Pume.
-Aléjate de mí- de nuevo Escoop arroja un destello de sus brazos, pero esta vez es Niko con su escudo quien lo recibe en lugar de Pume-. Así que están todos en mi contra. Bien, así lo han querido.
-Escoop...-dice Fureimes, pero es interrumpido:
-¡No me llames Escoop, ladronzuelo de segunda! ¡Mi nombre es Legolas! Y te enseñaré cómo se manejan esas habilidades que desperdicias.
Dicho y hecho, Escoop se volvió invisible y apareció detrás de Fureimes, lo despojó de su armadura y lo golpeó en el pecho elevándolo por los aires, con movimientos rápidos, seguros y efectivos. Entro en un frenesí de invisibilidad y visibilidad, quitando armas y armaduras a los Mob, dejándolos desprotegidos y derribándolos al suelo. Apuñaló por la espalda a Niko y huyó, después de unos minutos los Mob se levantaron y vistieron sus armaduras.
-¿Estás bien, Niko? -pregunta Manu,
-Sí, estaré bien, no golpeó ningún órgano vital, dame unas horas para curarme y volveré a estar en pie.
-¿Y ahora qué hacemos?- pregunta Bvtro.
-¿Qué la pasa a Escoop?- pregunta Fureimes.
-Está alterado- responde Pume-. Tenemos que ir por él, no es él mismo.
-Pero no sabemos dónde está- dice Bvtro.
-No, pero sabemos que volverá- asegura Pume-, olvidó su bolsa.
-¿Qué trae la bolsa?- pregunta Zopi tomándola.
-¡No! ¡Suéltala! Si hizo eso con Escoop imagínate qué hará contigo- dice Diego.
-¿Qué insinúas?- pregunta Zopi.
-Muy bien, esto es lo que haremos...- comienza Pumekeruz a formular y explicar un plan a los Mob.

Llega la noche en KriemHild y con ella una sombra que se desliza por los pasillos y corredores de piedra, avanza por el patio principal, por las escaleras, abre una puerta, sigue un largo pasillo, camina sobre una muralla, llega a una torre, baja la escalinata, llega a la gran puerta de madera y abre lentamente, entra y la puerta se cierra.

La sombra avanza lentamente, se detiene, ¿Qué pasa? No se puede mover... ¡Pume! ¡Le puso una trampa! “¡Sight!”. Un haz de luz naranja hace al suelo repeler de su escondite a Legolas, Fureimes lo toma por los brazos para que no escape y lo pone de rodillas.

-¡Manu, ahora!- grita Pume.

Manu a toda prisa busca en un libro un conjuro, Legolas se suelta del agarre de Fureimes, lo patea en el estómago y su puño encuentra a toda prisa la cara del hechicero que lo había encontrado, el ladrón y el mago caen al suelo, Legolas vuelve a las sombras y aparece justo frente a Manu, Niko lo repele con su escudo, Fureimes y Diego se levantan, lo toman cada uno por un brazo, Zopi se arroja para detenerle las piernas para mantenerlo en su sitio y Manu encuentra lo que busca.

-¡Dispell!- la voz de Manu retumba en los oídos de Legolas, éste cae de rodillas mirando al suelo y se desploma inconsciente sobre la fría piedra, los Mob lo levantan y apoyan en una pared.

-Legolas... Legolas... Legolas... ¡Legolas!- el que era retenido por los Mob abre los ojos lentamente...
-¿Quién diablos es Legolas? Yo soy Escoop- responde el sacerdote, Zopi lo golpea en el estómago- ¡Ouch! ¿Por qué hiciste eso, payaso?

Los Mob relatan lo sucedido a Escoop.

-Así que... ¿Legolas? -pregunta Fureimes.
-Fue hace mucho tiempo... olvídalo -responde Escoop.
-¿Qué tenía la bolsa? -pregunta Zopi.
-Es mejor que no lo sepas, Zopi- responde Pume.

Escoop toma la bolsa y la arroja al foso que rodeaba de agua la fortaleza.

-Ahora... lo someto a votación, Zopi me golpeó, ¿quién me apoya en que debo darle una madrina yo a él? ¿Todos a favor?

Manu, Niko, Pume, Fureimes y Bvtro alzan sus brazos.

-¿En contra?

Zopi alza su brazo.

-Lo siento, Zopi...